Narra exfubolista de UdeG conflicto en Israel "Vivo con la oreja en la ventana para oír las sirenas"

• El jugador de origen argentino está sufriendo los estragos de la guerra entre israelíes y palestinos

Foto: Twitter

Autor – Noticias Guerrero Hoy

19 de mayo de 2021 – Un viejo conocido del futbol mexicano como es el argentino Eial Strahman, quien militó en clubes como Leones Negros (2012-2013) y Venados (2014-2015), relató los difíciles momentos que vive hoy en Tel Aviv, capital de Israel, lugar que hoy está inmerso en una guerra contra Palestina.

“Es la primera vez que me toca algo así. Por suerte la pandemia se manejó muy bien y hasta días antes del conflicto la vida era completamente normal, no hay clases en las escuelas y depende de cada uno el querer salir o no. La gente sabe los protocolos a seguir, sabe cómo reaccionar con el sonido de las sirenas, yo en el departamento y siempre con la oreja pegada a la ventana para oír las sirenas e ir rápidamente al refugio”, indicó el atacante en charla con el diario Récord.

Strahman reconoció que se vio sorprendido recientemente que hubo un bombardeo cerca de su hogar, ya que era algo novedoso para él, aunado a que no escuchó la alarma y ni siquiera sabía que tenía que ir a un refugio, por lo que solo se tiró al piso.

“La primera vez que lo viví estaba durmiendo y me levanté con los misiles, no escuché las sirenas. Para mí fue uno de los momentos de más miedo porque no estaba en ningún refugio y lo que hice fue tirarme al suelo cerca de una pared sin ventanas. Tengo miedo siempre de no escuchar las sirenas y llegar al refugio, porque en el refugio se está seguro entre comillas”.

Ahora, el futbolista argentino está al pendiente del sonido de las sirenas, pues sabe que una vez que éstas comienzan a sonar solo tiene entre 15 segundos y un minuto y medio para refugiarse.

“Las sirenas suenan siempre de la misma forma y significan que se lanzó un misil a la zona donde se escucha la sirena. Una vez que el misil parte de la Franja de Gaza, el Sistema Cúpula de Hierro analiza la trayectoria y define una zona posible de impacto y ahí suena la sirena, y de acuerdo a la cercanía es el tiempo que uno tiene para llegar al refugio, va desde 15 segundos a un minuto y medio. Yo tengo alrededor de un minuto”.